Me pones sensible sobre todo en días cursis como estos... ay abuelo y a pesar de todo me da gusto que estés mas allá de todo lo que pasa por acá, nada realmente malo, por ti aprendí de forma muy dolorosa que definiitivamente la muerte es lo único que no tiene rectificación, lo demás son pequeñeces... Y que brindé mas de un par de veces contigo, y que se me sigue haciendo un nudo en la garganta por recordarte bien, e inevitablemente al final, recordar que nos ganaste... pero seguramente estas muy bien, nosotros viviendo... Un beso un abrazo fuerte, te amo viejito, siempre lo supiste, y sé cuanto me amabas también, sigue sonriendo para mí, para todos...